Keanu Reeves es sinónimo de película de acción de Hollywood. Aunque el actor ha convencido al público con su personaje de John Wick, ha hecho mucho más que eso. Si echamos la vista atrás en su filmografía, sin duda 'Speed' es uno de sus mejores proyectos, que consolidó aún más su figura de estrella de acción en la industria, y de la que ya han pasado 30 años. Sigue siendo una de las favoritas de los fans, y dio a su carrera un impulso significativo. Pero a muchos les sorprendería saber que el actor tomó una decisión inesperada para su papel que dejó atónito a todo el equipo.
Speed es considerado uno de los proyectos definitorios de la carrera de Keanu Reeves, en el que interpretó el papel de Jack Traven, un agente de policía de Los Ángeles. Su personaje se enfrentaba a una situación de alto riesgo, y el actor interpretó meticulosamente el papel, y noo cabe duda de que dio en el clavo aportando sus encantos únicos al personaje. Traven es valiente, ingenioso y rápido de reflejos, lo que fue posible gracias a la autenticidad y dedicación de Reeves, que cautivó al público y a la crítica por igual.
En una entrevista con Collider, el actor de John Wick reflexionó sobre su papel en la película de 1994, afirmando que el argumento de la película le convenció. "Acababa de hacer una película sobre surfistas ladrones de bancos y ahora estoy haciendo una película sobre un autobús que no puede ir a más de 80 km/h... Fue divertido meterse en el papel y me gustó que Jack Traven quisiera hacer el bien, como cuando crecía quería salvar a la gente".
Como Traven está muy decidido a perseguir la justicia y la seguridad, el actor de Point Break sorprendió al equipo con un inesperado cambio de imagen que nadie esperaba. Y añadió, "Cuando estaba pensando en Speed, pensé en los tipos de los SWAT y me corté todo el pelo, y la gente del rodaje me gritaba: '¡¿Qué has hecho?!".
¿Quién iba a imaginar que el actor llegaría a tales extremos para su papel de acción? Incluso el director de la película, Jan de Bont, reflexionó sobre el tema, confesando que la producción de la película estuvo a punto de verse en apuros por el error del corte de pelo de Reeves. Sin embargo, le preocupaba el aspecto del actor, que no se parecía en nada al personaje cuando se incorporó al proyecto. El director quería que tuviera "el aspecto de un joven adulto", mientras que el actor tenía inicialmente un aspecto "muy juvenil". Aunque el director quería pequeños retoques en su look, Reeves acabó despeinándose, lo que hizo enfurecer a los ejecutivos. Incluso le sugirieron conseguirle una peluca para el papel. Cuando el director rechazó la sugerencia, acabaron llamando a su representante para retrasar la producción debido a su pelo. "Llamaron a su representante, llamaron a su agente, dijeron: 'Vamos a tener que posponer esta película ahora', y yo dije: 'No, tenemos dos semanas más, y en dos semanas su pelo crecerá tanto. Es genial, es lo que quiero'. Estaban totalmente disgustados".
A pesar de los inesperados problemas de producción, la película acabó convirtiéndose en un éxito de taquilla, recaudando más de 350,4 millones de dólares en todo el mundo según Box Office Mojo. Además de Reeves, la película está protagonizada por Dennis Hopper, Sandra Bullock, Joe Morton y Jeff Daniels.
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